martes, 28 de mayo de 2013

EL MACHISMO SIGUE MATANDO

Se me antoja caprichoso el lenguaje cuando se utiliza para calificar de "hijo de puta" a un maltratador, o se omite de un discurso de repulsa (véase http://blogs.elpais.com/mujeres/2013/05/esta-situacion-o-asesinatos-machistas.html) el término "violencia machista". "Esta situación" es un bonito eufemismo que esconde una realidad tal vez peor sonante "el machismo mata". El problema es que lo que suena mal, es en realidad peor. Hoy, en esta semana negra, ha muerto otra mujer. Esta vez la hermana de una mujer a la que su expareja quería matar. Ella -la expareja- se ha salvado, aunque está herida de gravedad. Su hermana ha muerto. Otra muerte más y un mismo motivo: el machismo, el que hace que "hijo de puta" sea un insulto, el que condena a la mujer, el que la discrimina, el que la hace inferior al hombre y le otorga a estes derechos inscritos en el imaginario patriarcal, MATA. Y mirar para otro lado o hablar de "esta situación" está en las antípodas de la solución. Semana negra. No hay más que decir.

1 comentario:

  1. Hay aquí problemas añadidos que sumar, y son los mensajes contra-feministas que surgen actualmente por todas partes. En primer lugar parece que se ha instalado en la sociedad una nueva cultura que pretende hacer de la igualdad la máxima responsable de todos los males, que pretende convencernos de que las mujeres "debemos parar" por el bien de los demás. Lo que se intenta (y en casos se consigue) no es sólo negar que el machismo mata, sino darle la vuelta, de manera que ahora lleguemos a pensar que "el feminismo mata". Desde Rusia nos llegan noticias, por ejemplo, de que el gobierno ha instado a las mujeres a "cuidar de sus hombres" porque están "perdiendo la salud" y "están muriendo". ¿No será más bien este estado de hiper-capitalismo globalizado que no se detiene el que nos está haciendo perder la salud a todos pero también a todas aunque en este caso la salud de las mujeres, como siempre, no importa? Bien, en segundo lugar, además de esta subcultura, nuestro propio gobierno con sus leyes y sus mensajes no se queda atrás. El mensaje que está haciendo llegar es el del respeto a la religión y a la vida... otra vez de todos los que no sean las mujeres. Esto por sí solo no mata directamente, pero azuza las mentes enfermas de quienes pueden creer que el gobierno de algún modo "les entiende" y les "da la razón" para tratar peor a sus mujeres. Cada semana asistimos a más y más horrores mientras el gobierno continúa su labor anti-igualitaria, segregando por sexos en las escuelas, adoptando la religión como asignatura en la educación obligatoria, evitando hacer menciones a las mujeres muertas; negándonos el derecho a tomar decisiones sobre nuestro propio cuerpo. ¿Qué cree el gobierno que entienden los maltratadores con todo esto? Por último, en tercer lugar, desde el mundo del "arte" (novelas y películas) también parece que a los inversores les apetece invertir mucho más en aquellas cuyo mensaje es que a los vampiros y demás celebridades monstruíles se les puede controlar o "curar" con amor (con el amor... de las mujeres, claro, que son las que tienen una vez más el papel de aguantar el carro. Si esas mujeres murieran en el intento ya se encargan de presentarlo como la muerte más hermosa y romántica posible). Pero esto no es romanticismo, es un mensaje contra-feminista muy claro para las adolescentes, un mensaje que sigue diciendo que el amor se demuestra arriesgándose a morir a manos de un hombre y, si es preciso, con la propia muerte. La sociedad española, con este tema como con otros, debería hacérselo mirar.

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